La traición de los clérigos en la España de Franco

Hubo en España una Iglesia de cruzada, beligerante y bravía, con un pasado autoritario y represivo, que buscó el apoyo del poder político para dar soporte a la fe religiosa. El autor del libro cree necesario recuperar la memoria histórica y revisar el pasado inmediato para no perder nuestras raíces y piensa que, lejos de cualquier interpretación maniquea de la historia, la Iglesia española, globalmente, no ha tomado una postura de inacción. Tarancón, en los años cincuenta, obispo joven de Solsona; Aranguren y sus «Conversaciones católicas de Gredos», los movimientos obreros de Acción Católica, «semillero de izquierdismo», como se decía entonces; el concilio Vaticano II, las luchas estudiantiles, el compromiso social y político de algunos clérigos que daban protección a la resistencia contra el franquismo y que participaron activa y militantemente en ella, y algún obispo «maldito», fueron catalizador de transformación social en el seno del nacional-catolicismo. «De la tolerancia a la libertad» podía haber sido el subtítulo del presente libro. Porque de la Iglesia de cruzada y triunfalista se pasó a una Iglesia de la contestación para desembocar en la Iglesia reconciliadora, en cuya forja colaboró un gran sector del clero. El autor tiene la convicción de que, a medida que la Iglesia española iba perdiendo peso e influencia ideológica en la sociedad, ganaba en credibilidad, modernidad y tolerancia. Eran los años de esplendor de una Iglesia inteligentemente dirigida por el cardenal del cambio: Tarancón.